¿Alguna vez te has preguntado de dónde vienen nuestros cereales? ¿Has oído hablar de los granos enteros? Descubre por qué y cómo los mantenemos enteros desde el campo hasta tu mesa de desayuno.
¿Qué sentido tiene eliminar los nutrientes de los granos enteros, especialmente si constituyen una parte importante de una dieta equilibrada para tu familia? Al conservar todas las partes del grano, los cereales para el desayuno NESTLÉ® se aseguran de optimizar el contenido de nutrientes proporcionado por el propio grano. Para obtener más información sobre lo que constituye un desayuno balanceado y comprender todas las maravillas naturales de los ingredientes de granos enteros, haz clic a continuación.
El grano entero en cada paso del proceso
Desde el campo dorado hasta la mesa del desayuno, los granos se cosechan y se muelen para obtener harina de grano entero. Luego se mezclan con otros ingredientes como azúcar, sabores naturales (como cacao o miel), agua, vitaminas y minerales, y antioxidantes para hacer la masa. Finalmente, los horneamos. Como puedes ver, se requiere de mucho cuidado para transformar los granos enteros en cereal, pero vale la pena el esfuerzo. Esto hace que sea más fácil para ti disfrutar de los cereales enteros como parte de un desayuno balanceado. Nuestros procesos y recetas garantizan que brindaremos cereales nutritivos con vitaminas B y minerales. ¡Y nos ayuda a hacer un cereal para el desayuno muy rico!
Cómo hacer cereales: ¡en cuatro sencillos pasos!
Queremos que nuestros cereales para el desayuno sean muy ricos cuando lleguen a tu mesa de desayuno. Por lo tanto, confiamos en la simplicidad cuando los fabricamos y tratamos de mantener las cosas en nuestras fábricas lo más hogareñas posible; en realidad, la forma en la que horneamos no es muy diferente a la forma en la que tú horneas. No hay nada complicado y elegante en preparar cereales para el desayuno, ¡incluso podrías hacerlo en casa! Sigue leyendo para conocer una receta saludable para el desayuno que puedes preparar para ti y tu familia.
MOLIENDA
Del grano dorado a la harina de grano entero
Cuando el grano ha madurado bajo el sol, se ha cosechado y luego limpiado, se trae a nuestra fábrica. En la mayoría de nuestras fábricas, (casi siempre) lo molemos nosotros mismos, ya que esto reduce el tiempo entre la molienda del grano y el producto terminado (¡alrededor de dos horas!), por lo que la harina está realmente fresca. Y al hacer nuestra propia molienda, solo producimos la cantidad de harina de grano entero que necesitamos, ¡así que no hay desperdicio!
¿Cómo lo harías en casa?
Bueno, probablemente no molerías el grano tú mismo, ¡a menos que vivas en un molino! Pero la harina de grano entero que uses para hornear será bastante similar a la que estamos usando, solo que la nuestra generalmente será más fresca. Eso es porque, donde lo molemos nosotros mismos, va directamente del molino a la mezcladora.
COCINAR
¡Mézclalo todo y luego sube la temperatura!
Antes de cocinar los granos molidos, mezclamos la harina con agua y otros ingredientes, incluyendo vitaminas y minerales añadidos, y cocinamos la mezcla en una batidora al vacío para crear una masa. (Si vamos a recubrir el producto terminado más adelante, conservamos algunos ingredientes adicionales como chocolate o cacao en polvo).
¿Cómo lo harías en casa?
Esta es la parte de revolver, mezclar y batir del proceso de horneado. Es la parte en la que arrojas todos los ingredientes en un tazón y mezclas con ganas. Si estás horneando pan, es cuando amasas esa sustancia pegajosa hasta convertirla en una masa suave y flexible (o, para horror de tu abuelita, cuando echas todo a la panera).
DAR FORMA
Crear esas galletas y racimos
Luego, la masa pasa por una de nuestras máquinas especiales (piensa en una máquina para pasta o para hacer salchichas) para crear la forma del cereal que conoces y amas: aros, bolas, hojuelas, galletas y racimos.
¿Cómo lo harías en casa?
Cuando usas los cortadores de galletas para hacer tus galletas o pan de jengibre favoritos, le estás dando forma a tu masa, tal como lo hacemos nosotros.
HORNEAR
Cereal crujiente recién salido del horno
Finalmente, colocamos las formas del cereal en uno de nuestros grandes hornos donde se tuestan durante el tiempo justo. Imagina una secadora enorme y muy caliente, solo que esta no seca tus calcetines: les da a tus cereales un hermoso color dorado y un gran crunch. Cuando están listos, los dejamos enfriar (algunos de ellos obtienen una capa final de sabor, como un toque de cobertura de chocolate, ¡mmmm!). Luego los empacamos y los enviamos a las tiendas. ¡Y listo!
¿Cómo lo harías en casa?
Esta es la parte en la que "colocas tus pasteles en un horno precalentado durante 40 minutos". Solo que nosotros tenemos un horno más grande.